Marc Auge, los no lugares

Conceptos: sobremodernidad, sobreabundancia, exceso, no lugar

Marc Augé en su libro El exceso y los no lugares, reflexiona sobre la identidad del individuo en función con su relación con los lugares cotidianos y la presencia de la tecnología. Las nuevas tecnologías causan que el individuo se encuentro en un entorno constantemente cambiantes que genera una relación nueva a los espacios en este planeta y nuevas situaciones de tránsito. Por ejemplo, las carreteras, los aeropuertos, los terminales, las filas de un cajero, son todas espacios de tránsito. Son lugares donde el destino no está, son espacio generados para llegar al destino.

Para definir la sobremodernidad Augé lo divide en tres aspectos, el tiempo, el espacio y el individuo. Plantea que el individuo contemporáneo tiene dificultad con pensar el tiempo. Por el hiper desarrollo tecnológico, específicamente por los medios de transporte y sus velocidades, el espacio del planeta se a empequeñecido dando la instantaneidad del movimiento. Hay una sobreabundancia de visión instantánea de acontecimientos desde las imágenes, ya sea información, publicidad o ficciones que lleva al que el individuo crea universos homogéneos y una superabundancia espacial como engaño. Los individuos por consumir los mismos acontecimientos que se generan en los mismos espacios van creando esta homogeneidad. El tercer aspecto es la individualización donde el individuo cree interpretar esta información por y para si mismo.  

Los no lugares ya se han integrado a la condición humana, son lugares de tránsito, espera y anonimato. No se puede considerar un lugar desde la antropología porque los espacios antropológicos son vitales, por ejemplo, un lugar histórico, un espacio vital, un espacio donde se genera memoria  y los espacios donde nos relacionamos, donde se rompe el anonimato. Los no lugares te permiten ser otra persona, por ejemplo un hotel, un supermercado, una autopista, desde el rol de un pasajero, un cliente, un turista etc. usualmente en los no lugares el individuo se presenta desde los artículos de identificación o documentos, por ejemplo, carnet, pasaporte, etc.

Los no lugares carecen de configuración de espacio y tienen aspectos de artificialidad. Estos espacio carecen de símbolos (argumentable) que pueden dar lugar a la formación de identidad y son mensajes carentes de significado afectivo. Estos mensajes son una invitación a la circulación rápida y nos lleva a nuestro desplazamiento y minimiza la comunicación entre los individuos. en este espacios no tenemos voz, como anónimos y carecemos de importancia. La cercanía que se puede dar en estos espacios, por ejemplo en una fila de espera, se disuelve rápidamente, se dan de formas efímeras. Augé dice que todo lo que da sentido a la vida humana está ausente o masificado en estos espacios. El cotidiano se conforma del automatismo, olvido, brevedad de tiempo, carentes de memoria e identidad y contactos despersonalizados.

Auge finaliza con la conclusión de la soledad en la época posmoderna y la paradoja de la incomunicación en la era de las telecomunicaciones.

Qué le pasa a nuestra identidades como individuos? Me pregunto si la falta de identidad también se configura como una identidad. Se da el espacio para la construcción de una identidad colectiva centrada en el comercio y consumo. Nos identificamos desde lo que consumimos y los que vemos, perdemos esencia, pero no significa que no sea una identidad.

Artistas que trabajan con este tema:

• Martha Rosler
• Michael Light
• Igor Mischiyev
• Agnes Marcos